Extrañas. Extrañas personas, cosas y lugares. La nostalgia vino a visitar tu morada y se asoma por la ventana. Hay cosas que desearías que fueran igual que ayer pero ya no lo son. ¿No te haz detenido a pensar el por qué de tantos cambios? Hay personas que van de paso en la vida y no se dan cuenta que cada etapa de esta tiene sus personas, cosas y lugares. No podemos vivir en la constante inercia, paralizados en un mismo ciclo repetitivo. No somos seres ciclicos sino cambiantes, aún cuando pensamos que la inercia está haciendo su trabajo dentro de nosotros surgen cambios, cambios de pensamientos, cambios de emociones, cambios de nuestro ser espiritual de la mano de Dios. Resistirnos al cambio es lo que hace doloroso el proceso de transformación, es necesario dejar que el proceso sea completado sin resistencia. Cuando Dios decide que ya una etapa ha concluido en tu vida El abrirá puertas tal vez no convencionales para que comiences un nuevo rumbo, con nuevas personas, cosas y lugares que serán necesarias para los propósitos de El en tu vida. Los recuerdos del ayer, las buenas personas que estuvieron, las cosas que tuviste en el pasado ya no son necesarias en esta nueva etapa si lo fueran estarían hoy presentes. Ten en cuenta que Dios tiene todo orquestado perfectamente para que cada cosa organizada cumpla lo que El desea en ti. Los procesos de cambio son parte de crecer espiritualmente en El...No te resistas a ellos y no permitas que la nostalgia abrume tu presente, porque cosa nueva El anda haciendo para perfeccionar la buena obra que ha comenzado en ti. No pienses o afirmes que los tiempos pasados fueron mejores porque la realidad es que Dios sigue haciendo cambios para mejorar lo que fue tu pasado AHORA.
"Nunca digas: ¿Cuál es la causa de que los tiempos pasados fueron mejores que estos? Porque nunca de esto preguntarás con sabiduría." (Eclesiastés 7:10)(RVR1960)
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