Si no leemos la Biblia, ¿cómo pretendemos conocer quién es Cristo? Es en Su palabra que encontramos la revelación fresca de quien es nuestro Dios. Si no nos alimentamos diariamente con ella, estamos dejando áreas en donde seremos expuestos al desconocimiento, entonces podremos ser confundidos y manipulados fácilmente. ¿Cómo crees que puedes discernir si lo que te dicen proviene de parte de Dios o no? Por Su palabra. ¿Cómo puedes conocer las promesas de Dios y la voluntad de El? Por Su palabra. ¿Cómo puedes fortalecerte y madurar espiritualmente? Por Su palabra. No podemos dejar de escudriñar las escrituras y ponerlas por obra. ¿Cargas solamente tu espada o realmente la usas? ¡Hay que usarla! ¡Vamos a usarla TODOS los días!
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